Lectura Bíblica

Mateo 6:14-15
“14 Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial;
15 pero si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas”.

Reflexionemos

Estas palabras encierran una verdad transformadora: el perdón y el amor son la clave para ser una luz resplandeciente en el mundo y en casa es el primer lugar donde el amor de Dios debe manifestarse de manera tangible y auténtica.
El perdón es uno de los pilares de ese amor. Jesús nos enseña que debemos perdonar a aquellos que nos han ofendido, incluso cuando la tarea parezca difícil o imposible.

Al perdonar a otros, empezando por los de nuestra casa, estamos reflejando el perdón y la gracia que Dios nos ha dado.
Al perdonar y amar a nuestra familia, les mostramos el corazón de Dios.
Les ofrecemos una visión clara de Su amor que todo lo transforma.

En lugar de guardar rencor o resentimiento, decidamos perdonar y amar sin reservas.
Nuestros actos de amor y perdón pueden encender una chispa de esperanza en los corazones de aquellos que nos rodean.
Nuestra luz puede guiarles hacia la verdad y la plenitud que solo se encuentran en Dios.

Que nuestras palabras y acciones reflejen siempre la gracia y el perdón que hemos recibido del Padre Celestial.