Buenos días
GUIA DE LECTURA DEVOCIONAL COMUNIFECALI
Febrero 17 de 2025

Uno de los mayores peligros para los cristianos es que su corazón se vuelva insensible a Dios. Esto significa que poco a poco dejan de ver, entender, oír y recordar lo bueno que es Dios y lo que ha hecho por ellos (Marcos 8:17-18).

LECTURA BÍBLICA  

Salmo 139:23-24 NBV
“23 Examíname, Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos.
24 Señálame lo que en mí te ofende, y guíame por la senda de la vida eterna”.

1 Juan 1:9 NBV
“Pero si confesamos a Dios nuestros pecados, él, que es fiel y justo, nos perdonará y nos limpiará de toda maldad”.

Salmos 119:9-11 NVI
“9 ¿Cómo puede el joven mantener limpio su camino? Viviendo conforme a tu palabra.
10 Yo te busco con todo el corazón; no dejes que me desvíe de tus mandamientos.
11 En mi corazón atesoro tus dichos para no pecar contra ti”.

 

 

NO OLVIDES

Si dejamos que nuestro corazón se endurezca, no solo nos distanciamos de Dios, sino que también nos volvemos menos sensibles a las necesidades de los demás y nos cuesta más perdonar.
Por eso, a través de las Escrituras el Espíritu Santo nos llama constantemente a permitir Su obra en nuestro corazón.

3 acciones indispensables para guardar nuestro corazón de la dureza y de alejarnos de Dios:
1) Examinando continuamente nuestro corazón y pidiendo al Espíritu Santo que nos examine, estorbe al pecado y nos ayude a ser conscientes cuando deshonramos a Dios.
2) Pidiendo perdón con arrepentimiento verdadero, el cual se manifiesta en una vida cambiada.
3) Guardando la Palabra de Dios en nuestro corazón, atesorándola y obedeciéndola.

Nuestro amado Señor puede suavizar incluso los corazones más endurecidos, transformándolos en instrumentos de amor y gracia.
Aferrémonos hoy a la promesa de Ezequiel 36:26, “Les daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes. Les quitaré ese terco corazón de piedra y les daré un corazón tierno y receptivo”. Amén.

@ComunifeCali

Preguntas: 

1. ¿Qué aprendí hoy cerca de Dios Padre, Jesucristo o el Espíritu Santo?
2. ¿Hay algún mandamiento que debo obedecer y algún pecado que debo confesar y abandonar?
3. ¿Qué decisión tomo de lo que Dios me habló hoy, cómo lo voy a hacer y cuándo empiezo?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

WhatsApp Charla con nosotros